Etapa 5. Ourense - Lalín.

"Caminante no hay camino, se hace camino al andar, y al volver la vista atrás, se ve el camino que no se ha de volver a pisar".

Día 29 de Abril, miércoles. Toca salir de Ourense, los mapas que nos dan en el Hotel (si, hotel... en una de sus acepciones más económicas) marcan por donde., aunque las piernas son las que tienen que empezar a trabajar duro., y es que la salida de Ourense son de las que se recuerdan... qué subidas!. Lo reconozco., algún tramo tocó hacerlo andando.

Y es que se va notando el paso de los días., cada vez somos más "diesels", cada vez guardamos más fuerzas... y así llegamos a la primera de las paradas, era pronto, pero había un bar que parecía puesto aposta para nosotros. Estábamos en Vilamarín. Nada más llegar nos encontramos a unos peregrinos insulares que amablemente nos invitaron a un vino... nos empezábamos a sentir bien., y el vino nos llevó a una cerveza, y con ella la camarera nos puso un montadito que estaba riquísimo... y a José le apetece queso, y la amable camarera nos pone queso... y nos acordamos que llevábamos algo de jamón para picar, y nuestros amigos sevillanos sacaron alguna vianda que les quedaba, y la camarera -que a estas alturas de la hitoria ya se llamaba Raquel- nos demuestra que es un Angel del Camino, una chica super atenta que nos hizo sentir como en casa.

Raquel nos contó que en unos días se iba a realizar la fiesta de la "Caca de la Vaca", singular y curiosa donde la haya. Antes de salir nos hicimos las fotos de Rigor entre ellas una que hizo Rakel (con K, porque así nos lo dijo ella) con el propósito de ir llenando su bar de fotos de peregrinos... algún día volveremos para ver nuestra foto y volver a disfrutar de la amabilidad de Rakel.

Seguimos en Camino,

La mañana se nos había echado encima y habíamos andado poco., ya es la 5ª etapa y eso se nota. Los caminos, como el de la foto, invitan a disfrutar. Una vez más me viene a la cabeza la idea de que el Camino en bici se debe hacer levantando la cabeza de la rueda y viendo por donde se pasa.

Cae alguna gota, pero muy poco. El tiempo nos ha respetado. Y así llegamos a las 15.30 a Oseira,

Como no puede ser de otra manera, y el que ha pasado por Osería lo sabe, nos impresiona su Monasterio Circense de Santa María de Oseira. La visita guiada no es hasta las 16.30., por lo que nos quedamos con la visión exterior y la de su tienda., en ella nos recibe el Hermano Luis., su nombre lo sabemos porque nos regala una pequeña tablita dibujada por él con la firma "FML", nos explica que significa "Fray María Luis" y que todos los hermanos de la Orden llevan el "Fray María" delante de su nombre.

Aquí abro un paréntesis en el Camino para comentar la web del Monasterio hecha por los hermanos. Es la mezcla entre la modernidad de internet y lo clásico de la religión y su orden. No tiene desperdicio, tanto por el diseño de su web como por los contenidos (he visto que los hermanos se levantan todos los días a las 5.15, que el hermano Luis a sus 63 años tiene una galería virtual y que sus inicios en la pintura fueron en Londres..... todavía tengo la boca abierta.

Pero bueno, tenemos que seguir. No comemos porque el tentenenpie de la mañana nos permite seguir.

La tarde la paso gran parte con Paco y de ella recuerdo un par de anécdotas de las que todavía me rio recordándolas, una de ellas tiene que ver con el afán de José de llegar a la misa del Peregrino, difícil misión de por sí pero imposible de conseguir entre otras cosas con las fotos que por el camino quiere hacerse, recuerdo el comentario de Paco cuando José pidió que le hicieran una foto con una vaca que había pastando., Paco dijo: "así vamos a llegar a la misa. Como si nunca hubiera visto una vaca, pero si va a Cantabria y tiene fotos con todas las de allí...". Sé que José y Paco leerán esto con una sonrisa.

La otra anécdota tiene que ver con el lugar donde comemos las 18:30., Parrillada Alonso. En ella pedimos algo de comer... de primero nos ponen 2 perolos de sopa buenísima que da para un par de platos para el que quiere repetir, antes del segundo nos ponen una bandejas de almejas que estaban para quitar el hipo. Con esos 2 platos habíamos comido. Pero faltaba el "segundo", otras bandejas con filetes -otros 2 por cabeza- invitaban a pedir cama y dormir ahí. Como dijo Paco, "menos mal que no hemos pedido ensalada, que si no arrasan con un campo de lechugas que había al lado".

Y así llegamos a Lalín como improvisado lugar de parada y fonda. De Lalín nos quedamos con el "Restaurante Cabanas", nos trataron de maravilla. La comida para recordar, pero la atención de los 2 dueños, Pepe y Auri así como su conversación y su generosidad con su tiempo es para mencionar. El Restaurante tiene un montón de fotos de gente famosa que ha pasado por allí, Pepe nos hizo una foto y dijo que la pondría con el resto de las que tenía... quizás se quede en intención como nuestras promesa de enviarle las fotos que nos hicimos, pero la intención es lo que cuesta.

Y así cerramos la penúltima etapa antes de Santiago, hoy se han hecho 64,84 kilómetros. Hemos vuelto a estar más de 5 horas dando pedales, en concreto 5h02'44''. La media de hoy es de 12,84 km/h., la más baja de toda el Camino... una vez más se demuestra que ninguna etapa es fácil.